(EFE).- Citroën he tenido que retirar un anuncio de uno de sus vehículos en Egipto tras provocar una polémica e indignación en las redes sociales por la campaña en la que se ve a un conductor tomar una foto de una mujer sin su consentimiento, lo que ha sido catalogado de incitación al acoso sexual.
«Nos han hecho saber que una escena de nuestro último anuncio de televisión de Citroën C4 en Egipto (…) ha sido percibida como inapropiada», afirmó la marca en un comunicado difundido en las redes sociales.
«Lamentamos profundamente y entendemos la interpretación negativa de esta parte del anuncio. Hemos tomado la decisión de retirar esta versión del anuncio de todos los canales de Citroën y presentamos nuestras sinceras disculpas a todas las comunidades ofendidas», concluyó.
En la campaña se ve al reconocido cantante egipcio Amr Diab conduciendo el C4 y frenando en seco cuando una mujer pasa por delante de su automóvil; el hombre sonríe astutamente y le saca una foto con la cámara integrada en el espejo retrovisor de este modelo de vehículo, que el anunciante pretendía destacar de esta forma.
Tras tomar la foto, sin que la mujer lo sepa ni dé su consentimiento, su imagen robada se ve en la pantalla del móvil del conductor, conectada a la cámara del retrovisor, y finalmente aparece el eslógan de la campaña publicitaria: «Saca una foto a cada momento bonito».
Diab no ha reaccionado ante la retirada del anuncio tras las críticas que ha recibido, en un país donde el 99 % de las mujeres han sufrido algún tipo de acoso sexual, según el último estudio de la ONU en Egipto, publicado en 2013.
Reem Abdellatif, activista egipcia por los derechos de la mujer, afirmó en su cuenta de Twitter que «hacer una foto de una mujer sin su consentimiento es algo horripilante» y añadió que este anuncio «permite el acoso sexual».
En Egipto el acoso sexual es un fenómeno muy común pero es tabú debido a los valores machistas y conservadores de la sociedad, en la que en los últimos años han aumentado la conciencia respecto a este problema así como las medidas para atajarlo.
Las autoridades han dado algunos pasos para poner fin a esta lacra en los espacios públicos, aunque en muchas ocasiones han sido medidas estéticas sin impacto en la vida de las egipcias, tal y como denuncian organizaciones feministas.