Leticia Núñez (ALN).- Pulso geoestratégico en alta mar. EEUU mandará un buque hospital a Colombia. China hará lo mismo pero a Venezuela. Las alianzas vuelven a quedar de manifiesto. En esta ocasión, con la crisis humanitaria venezolana como escenario. Expertos consultados por ALnavío hablan de “maniobras tácticas dentro de la estrategia de cada país” en Latinoamérica. Washington por el riesgo de desestabilización regional debido al imparable éxodo. Pekín para ganar influencia.
Estados Unidos enviará un buque hospital a Colombia y China hará lo mismo… pero a Venezuela. Ya ven. Dos ejes claramente diferenciados. Dos bloques de aliados. Un verdadero pulso geoestratégico que sale a relucir incluso cuando el trasfondo es la ayuda humanitaria a los migrantes venezolanos.
Por un lado, está el eje Washington-Bogotá. Por otro, el que forman Pekín y Caracas. Las alianzas han quedado de manifiesto una vez más esta semana. Primero, el secretario del Consejo de Defensa de Venezuela, Angiolillo Fernández, informó en Twitter que un buque hospital proveniente de China realizará una operación en Venezuela.
Indicó que las acciones del barco hospital son para “apalear el saboteo de EEUU” y señaló que el presidente Nicolás Maduroordenó que se coordinen acciones para permitir “la llegada de la Armada” china.
Buque hospital chino realizará operación en Venezuela para apalear el saboteo de EE.UU. Las coordinaciones para la «llegada de la Armada» china fueron ordenadas por el presidente venezolano, Nicolás Maduro Moros. pic.twitter.com/CyeK7d804N
— Angiolillo Fernández (@angiolillofp) 19 de agosto de 2018
Después, EEUU confirmó que desplegará en aguas colombianas el buque USNS Comfort, un barco hospital con capacidad para más de 1.000 pacientes y que ayudará a las autoridades de Colombia a hacer frente a la llegada masiva de venezolanos. En un comunicado, el Departamento de Defensa estadounidense señaló que a partir de septiembre este barco podrá ofrecer tratamiento a “miles” de personas en peligro. Venezolanos que huyen cada día del hambre, la falta de esperanza y la inseguridad personal provocados por el régimen de Maduro. Escapan de una nación destruida. Según Naciones Unidas, se han marchado 2,3 millones de venezolanos. Pero una encuesta de Consultores 21 cifra el éxodo en cuatro millones.
“Se trata de un problema humanitario de un calado con pocos precedentes. Requiere una respuesta regional y continental, y ahí es donde está Estados Unidos. Primero por motivos humanitarios y segundo por el riesgo de desestabilización regional”, explicaRogelio Núñez, investigador del Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Alcalá de Henares (Madrid), en declaraciones al diario ALnavío.
“Pekín no se va a comprometer con un régimen moribundo [el de Maduro] si no es para ganar influencia en la zona”
En el caso de China, dice Núñez, “es una forma de demostrar que no sólo desarrolla geopolítica dura -militar y comercial- sino también poder blando. La capacidad de influencia se gana con acciones humanitarias como esta”.
De hecho, el experto advierte que aunque China se ha comprometido con Venezuela, “está llevando a cabo una política bastante prudente, no es una política de apoyo total”. Por ello, sentencia: “Pekín no se va a comprometer con un régimen moribundo [el de Maduro] si no es para ganar influencia en la zona”.
Cabe destacar que China es uno de los escasos aliados que le quedan a Venezuela. No obstante, el auxilio financiero de Pekín no salvará al régimen de Maduro, como publicó el historiador Pedro Benítez en ALnavío. Desde hace más de 10 años, China le ha prestado a Venezuela más de 60.000 millones de dólares a cambio de asegurarse un suministro petrolero que ha llegado a 500.000 barriles al día.
Asimismo, los dos gobiernos firmaron numerosos convenios de cooperación. Pero los préstamos chinos no han podido evitar la crisis de las finanzas públicas venezolanas, ni la caída de la producción petrolera venezolana (Ver más: El auxilio financiero de China no salvará al régimen de Maduro). A todo ello se suma que el Gobierno chino ya se ha asegurado el suministro de petróleo y gas por parte de Rusia.
“Son maniobras tácticas”
De la estrategia geopolítica en el envío de los buques también habla Alfredo Rodríguez, director del Máster en Políticas Públicas de Seguridad en la Universidad Camilo José Cela (Madrid). En declaraciones a ALnavío, subraya el interés humanitario de paliar la situación “francamente mala” de Venezuela. “Sin embargo, no me cabe duda de que hay un interés político y, por tanto, son maniobras tácticas dentro de la estrategia de cada uno de los países en la región”, asegura, para agregar: “Lo estamos viendo continuamente. La ayuda humanitaria, casi siempre, viene precedida de un interés de determinadas comunidades en la zona y este es otro caso evidente”.
Venezuela acusa a Estados Unidos de ser el culpable de todos sus problemas y con Colombia la situación es tensa desde hace tiempo, algo que se ha agravado en los últimos años. El expresidente Juan Manuel Santos se convirtió en el gran líder de la respuesta internacional ante los abusos del régimen chavista.
Por eso, el buque hospital que EEUU enviará a Colombia “refleja que Washington sigue apoyando a Bogotá y refleja que Iván Duque tiene una ideología más cercana a los republicanos estadounidenses”, dice Rodríguez.
Por su parte, Núñez destaca que la alianza entre Álvaro Uribe y EEUU es histórica aunque el Plan Colombia lo firmó Andrés Pastrana. “Pero no sólo es la alianza. Hay un riesgo muy grande de desestabilización regional con esta crisis humanitaria. Se requiere una respuesta coordinada en América Latina”, insiste.
El buque hospital no es la única medida de apoyo de EEUU con Colombia. El 9 de agosto Washington anunció una ayuda de nueve millones de dólares para los inmigrantes venezolanos en Colombia. “Estos fondos adicionales profundizan los actuales esfuerzos de Estados Unidos para proporcionar comida, agua, cuidados médicos y otra ayuda humanitaria esencial en Colombia y en toda la región a los venezolanos vulnerables”, afirmó la Agencia de EEUU para el Desarrollo Internacional (Usaid), en un comunicado. Esos nueve millones de dólares se suman a los 46 millones de dólares enviados por EEUU para ayudar a los inmigrantes venezolanos en 2017 (Leer más: El éxodo venezolano ya no se tolera de igual forma en Latinoamérica).
“Es una misión absolutamente humanitaria. No estamos enviando soldados”, dijo Mattis
Y es que Colombia ocupa un lugar destacado en la agenda latinoamericana de Donald Trump. Hace tiempo que Washington y Bogotá unificaron la estrategia frente a Maduro. Para el expresidente colombiano Juan Manuel Santos, la continuidad del régimen chavista era mucho más que un problema en el ámbito de las relaciones internacionales. Era un asunto interno de primer orden en Colombia. Sólo en 2017 entraron en el territorio 750.000 venezolanos. Con Iván Duque esto se mantiene. De hecho, el mandatario colombiano viajó a EEUU a principios de julio para tejer alianzas. Se reunió con altos cargos del gobierno de Trump que son figuras clave en la política frente a Maduro (Ver más: Iván Duque teje alianzas en EEUU).
Las características de los buques
El USNS Comfort, además de 1.000 camas, cuenta con una docena de salas de operación, servicios radiológicos digitales, un laboratorio y una farmacia, así como con un helipuerto habilitado para el aterrizaje de aeronaves de gran tamaño, como informó la agencia France Presse.
El buque, de 272 metros de eslora, estuvo el año pasado en Puerto Rico, tras el devastador paso del huracán María, que dejó 4.600 fallecidos, según un estudio publicado el pasado mayo en la revista científica New England Journal of Medicine. También brindó asistencia tras el sismo en Haití en 2010.
Tras una gira por Suramérica la semana pasada, el secretario de Defensa de EEUU, Jim Mattis, anunció que la intención es desplegar el barco para atención médica ante la creciente llegada de migrantes venezolanos a Colombia. “Es una misión absolutamente humanitaria. No estamos enviando soldados, estamos enviando doctores. Es un esfuerzo muy específico para ayudar a nuestros vecinos”, dijo Mattis, tal como recoge el periódico colombiano El Heraldo.
Sobre el buque chino, el pasado 13 de julio, el Comando Estratégico Operacional venezolano habló en Twitter del barco He Ping Fang Zhou (Arca de la paz), que ha desarrollado otras misiones en países del Caribe y África. Fue construido en 2008. Está equipado con tecnología médica puntera y preparado con el fin de recibir helicópteros para la evacuación de enfermos.