(EFE).- El Gobierno de Venezuela rechazó «categóricamente» este jueves la restricción de visa para ingresar a Estados Unidos a «funcionarios y políticos» de la «hermana» Honduras por «supuestos actos que atentan contra la estabilidad democrática», medida que Caracas considera una «violación al derecho internacional».
EE.UU. anunció el martes la restricción de visa para ingresar a ese país «a ciertas personas» de Honduras, por «socavar la democracia y permitir el nombramiento irregular y sin precedentes» de un fiscal general y un fiscal general adjunto de manera interina.
El Ejecutivo venezolano, según un comunicado difundido este jueves, aseguró que esta medida del país norteamericano también «supone una forma de agresión y de presión política que busca socavar la integridad y la estabilidad de Honduras».
«La República Bolivariana de Venezuela reitera su solidaridad con el pueblo y el Gobierno de Honduras, y exhorta al Gobierno de los Estados Unidos a cesar su política injerencista e intervencionista que amenaza la paz y la seguridad de los pueblos latinoamericanos y caribeños», agregó la Administración de Nicolás Maduro.
#Comunicado Venezuela rechaza categóricamente las sanciones impuestas por el Departamento de Estado de los Estados Unidos en contra de funcionarios y políticos de la hermana República de Honduras el pasado 12 de diciembre de 2023. pic.twitter.com/jvtEQ16uPF
— Yvan Gil (@yvangil) December 14, 2023
La medida de EEUU a Honduras
El portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Matthew Miller, según un comunicado difundido el martes en medios locales de prensa, expresó que su país «condena el reciente uso de la violencia en Honduras para socavar la democracia y permitir el nombramiento irregular y sin precedentes de un fiscal general interino y un fiscal general adjunto interino».
Los dos fiscales interinos son el general, Johel Zelaya, y el general adjunto, Mario Morazán, quienes fueron electos el 1 de noviembre por una Comisión Permanente del Parlamento creada ese mismo día por su titular, Luis Redondo, con nueve diputados oficialistas, cuando la ley dice que deben ser electos por una mayoría calificada de 86, de los 128 que integran el legislativo.
Zelaya y Morazán fueron electos de manera interina luego de la falta de consenso entre las principales bancadas del Parlamento, en el que el oficialista partido Libertad y Refundación (Libre) solo tiene 50 de los 128 diputados.
La elección interina de los dos fiscales derivó en actos violentos en las afueras del Parlamento, al tiempo que 76 diputados de la oposición se autoconvocaron y no reconocieron a la Comisión Permanente, ni a los titulares interinos del Ministerio Público.