Redacción (ALN) .- El Centro Carter publicó el informe final sobre la observación en las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio en Venezuela.
En el documento, el organismo reiteró que no puede garantizar la integridad de los resultados anunciados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) que dieron como ganador a Nicolás Maduro. Esto debido a «la falta de transparencia» y de «no cumplir con los estándares internacionales que garantizaran unos comicios democráticos».
«El mecanismo de quejas y recursos en Venezuela -tanto la vía administrativa a través del CNE como la vía judicial a través de los tribunales ordinarios- carece de confianza y los participantes no lo consideran útil para resolver disputas. Además, la corrupción, la parcialidad y el carácter discrecional de las decisiones (o la falta de respuesta a las quejas) se citaron como argumentos que desalientan la búsqueda de soluciones a través de las vías legales previstas por la legislación electoral. Muchos interlocutores denunciaron la falta de independencia e imparcialidad de la administración electoral y del poder judicial, que son percibidos como apéndices del poder ejecutivo, y la ausencia de un Estado de derecho en Venezuela», dice el texto.
El documento también aborda los aspectos críticos como la observación electoral, el uso de los medios de comunicación y las tecnologías electorales.
Las recomendaciones
Asimismo, recomendó que las autoridades demuestren respeto por la voluntad de los ciudadanos venezolanos permitiendo una revisión transparente e independiente de los resultados de las elecciones presidenciales de 2024.
«Se debe garantizar que cualquier enmienda significativa al marco jurídico electoral se realice con suficiente antelación a las elecciones y con un amplio consenso político, con el fin de proporcionar seguridad jurídica, una oportunidad adecuada para los ajustes operativos y la concienciación de las partes interesadas. Además, modificar, derogar o retirar las leyes, proyectos de ley y reglamentos que pretendan restringir indebidamente la libertad de expresión y de asociación», apuntó.
De igual forma, el Centro Carter recomendó establecer límites claros a los mecanismos de control social de los votantes y evitar la violación de los derechos de los votantes, como los «puntos rojos» para verificar que la gente ha votado.
Además, «garantizar la publicación oportuna y completa de todos los datos relativos a los resultados electorales declarados, incluidos los resultados por colegio electoral, y garantizar la publicación de todos los formularios de resultados».
El Centro Carter también pidió reconsiderar los procedimientos de nombramiento del CNE para garantizar un mayor apoyo y confianza de todos los partidos y partes interesadas en el CNE «como organismo independiente, imparcial y profesional».
El organismo destacó que se debe publicar toda la información pertinente de forma rápida y sistemática, incluidas las decisiones del CNE y el calendario electoral, y celebrar reuniones marco de consulta periódicas con las partes interesadas para aumentar la transparencia y la confianza en el proceso.
«Hay que mejorar el sistema de notificación y la formación del personal electoral para que sea menos probable que sean sustituidos el día de las elecciones por personas sin formación partidista. También garantizar la transparencia, hacer públicos los criterios para solicitar la creación de nuevos colegios electorales y las razones para conceder o rechazar las solicitudes. Y Establecer un calendario electoral de manera oportuna que permita llevar a cabo adecuadamente la preparación de las elecciones», expresó.