Redacción (ALN).- El presidente de Brasil afronta la semana más dura de su mandato. La Cámara de los Diputados decidirá si le mantiene en el cargo ante el delito de corrupción pasiva del que le acusan.
Semana clave para el futuro de Michel Temer. La Cámara de Diputados de Brasil decidirá si el presidente debe seguir en el cargo. Sobre él recae un delito de corrupción pasiva. A mediados de mayo, el diario O Globo reveló un audio en el que el mandatario pide a un exdiputado encarcelado que se mantengan los sobornos. Temer lo negó. No así su compañero de partido, Sergio Zveiter, y a su vez relator de la Comisión de Constitución y Justicia de la Cámara Baja, responsable de analizar la denuncia. Zveiter concluyó este lunes, en una sesión plenaria, que existen indicios “suficientes” para analizar las posibles irregularidades. Mientras, Temer, en una comparecencia en el Palacio del Altiplano celebrada este martes, aseguró “respetar cualquier decisión” de los diputados. La ley obliga a que si dos terceras partes de la Cámara Baja aprueban los cargos contra el presidente, el futuro de éste pasa a manos del Tribunal Supremo. Si las acepta, Temer quedaría apartado de la Presidencia hasta que concluya el impeachment, resaltó la agencia Europa Press. Para ello, tendrían un plazo máximo de 180 días.