Redacción (ALN).- Suiza quiere adelantarse a China en el gran proyecto del presidente Evo Morales, un tren que une las dos costas del continente y generará contratos de más de 10.000 millones de dólares.
A Suiza le interesa, y mucho, el tren bioceánico de Bolivia. De acuerdo con el diario suizo Sonntags Blick, al que cita la agencia EFE, el gobierno helvético apoyará el proyecto ferroviario que pretende unir las dos costas del continente latinoamericano desde Perú hasta Brasil pasando por Bolivia. Lo hará a través de un acuerdo de intenciones que firmarán en Berna. Allí estará el presidente boliviano, Evo Morales, el próximo 14 de diciembre junto a su equipo para suscribir el tratado con la Confederación Helvética y la ministra Transporte, Doris Leuthard. “A fin de ser más fuertes que la competencia de China, varias asociaciones de la industria suiza y alemana trabajan juntas para poder participar en el megaproyecto y también los dos gobiernos cooperan mano a mano”, resalta el periódico suizo. Y es que varias empresas del país tendrían “buenas posibilidades de poder suministrar trenes o locomotoras”. Sobre todo, la locomotora para trenes cremallera de la compañía Stadler Rail se prestan para pasar por la cordillera de los Andes. Esta declaración de intenciones se explica por la magnitud del proyecto: de cara a 2025, fecha del bicentenario de la independencia de Bolivia, se prevé la inauguración del tren bioceánico, el cual tiene un recorrido de 3.750 kilómetros destinado al transporte de mercancías y pasajeros. Los contratos estarán principalmente ligados a la planificación, construcción de la infraestructura y suministro de locomotoras y vagones, pero también al mantenimiento. Estos se elevan a entre 10.000 y 14.000 millones de dólares.