Redacción (ALN).- BBVA vende una cartera de préstamos valorada en 1.000 millones de euros y cierra la estrategia de desinversión inmobiliaria iniciada en 2012 en España.
BBVA pone punto final a la estrategia para reducir los activos problemáticos ligados al mercado inmobiliario español. Este lunes, el grupo bancario vendió la última cartera de créditos que le preocupaba al fondo canadiense Canada Pension Plan Investment Board. Una serie de préstamos valorados en 1.000 millones de euros que comprende viviendas ya construidas en Andalucía, Madrid, Valencia y Cataluña, indicó a la agencia Reuters una fuente conocedora de la operación. Desde diciembre de 2016, BBVA se ha centrado en reducir la exposición al sector inmobiliario en 20.000 millones de euros. Este plan coincidió con que el mercado inmobiliario español vive un fuerte repunte que ha llevado zonas de las grandes capitales, como Madrid y Barcelona, a situarse en niveles de antes de la crisis, siendo esta recuperación económica la que permitió a BBVA eliminar activos tóxicos en apenas dos años. La principal operación de venta del banco tuvo lugar en noviembre de 2017, cuando entregó 80% del negocio inmobiliario al fondo estadounidense Cerberus. Una operación por un valor de 13.000 millones de euros que se concretará en el tercer trimestre de 2018, según precisó la empresa.