Daniel Gómez (ALN).- La continua expansión de la economía global, una reducción de los precios del petróleo, las bajas tasas de interés, la existencia de sectores con potencial y una política fiscal expansiva permiten a España seguir creciendo por encima de la media europea. Así lo afirma BBVA.
La economía española se debilita, pero no se estanca. “Todavía está lejos de llegar a ese punto”, precisó Rafael Doménech, responsable de análisis macroeconómico de BBVA Research.
El equipo de investigación de BBVA presentó este lunes, en su sede en Madrid, el informe Situación España 2018. Los pronósticos advierten sobre un crecimiento de 2,6% en 2018 y de 2,4% en 2019, tres y una décima menos, respectivamente, que lo calculado hace tres meses por el banco.
“Esta tendencia a la desaceleración es suave, por lo que no evidencia un avance hacia el estancamiento”
Este frenazo se explica por riesgos externos como el proteccionismo y la caída en las exportaciones. Pero también por incertidumbres internas, como el debilitamiento del consumo, el alto nivel de desempleo, y la falta de soluciones estructurales para estimular el mercado laboral.
Según Doménech, “esta tendencia a la desaceleración es suave, por lo que no evidencia un avance hacia el estancamiento”. El economista confía en que España crezca a ritmo de 2% en un horizonte mediano. Y cinco son los motivos que le hacen pensar así.
Expansión global constante. “El crecimiento global se mantiene a un ritmo constante. O, mejor dicho, más que suficiente para que España siga creciendo por encima del 2%”, dijo el economista.
La semana pasada en Bali, el Fondo Monetario Internacional (FMI) celebró la reunión anual y presentó las previsiones de crecimiento. Christine Lagarde, jefa del organismo, anunció que la economía mundial crecerá 3,7% en 2018 y también en 2019. Esto está dos décimas por debajo de sus anteriores predicciones, lo cual llevó al FMI a advertir sobre los riesgos de la guerra comercial.
Pese al mal augurio, ese ritmo de crecimiento es suficiente para estimular una economía como la española. Así lo piensa Doménech. Además, en el informe, BBVA resalta que España sigue creciendo por encima de la media de 2% de la Eurozona.
Acomodación monetaria. Este es otro punto que contribuye a la economía española. Y es que, como recuerda el economista de BBVA, “las tasas de interés se mantendrán bajas”. Eso siempre es una buena noticia para los bancos, ya que respalda la demanda de crédito.
Frenazo en los precios del petróleo. Desde el banco confían “una reducción de los precios del petróleo”, y eso es una buena noticia para la mayoría de las empresas españolas. Como tienen una alta dependencia energética, eso les permite “ser más competitivas”.
Sectores con potencial. El turismo es el motor económico de España. Este 2018 ha perdido fuerza por la recuperación de mercados como Turquía, y el excepcional clima que han vivido muchos países de Europa, como Alemania y Reino Unido.
Si bien este sector se debilita, lo cual no es una buena noticia para la creación de empleo, hay otros que sí presentan mucho potencial. “Hay cierta capacidad ociosa para calentar la economía española”, dijo Doménech.
Uno de esos sectores es la construcción. Según BBVA, este sector “aún tiene un largo camino por recorrer para reemplazar al turismo como una fuente de creación de empleo”. No obstante, que exista ese largo camino invita al optimismo. “Tenemos mucha capacidad productiva por utilizar”, explicó.
Política fiscal más expansiva. La política fiscal “es claramente más expansiva”, recalcó Doménech. En España se acercan las elecciones, y eso es sinónimo de mayor gasto. Lo cual, según BBVA, deberá notarse de inmediato en el crecimiento de la economía española.