Daniel Gómez (ALN).- “Sentimos que estamos haciendo lo correcto. Que Maduro es ilegítimo. Que la Asamblea Nacional es la que tiene que resolver el conflicto. Y que Juan Guaidó es quien tiene que liderar esta transición”. Eso dijo el diputado venezolano Carlos Valero, tras reunirse con el presidente español, Pedro Sánchez, este martes en Santo Domingo. Todos los detalles de esa reunión se los cuenta el diputado a ALnavío.
Todo se fraguó en cuatro horas. A las 8 de la mañana la oposición venezolana casi descartaba la reunión con Pedro Sánchez, presidente de España. A las 9 todo cambió. Desde el PSOE les comunicaron que había “altas probabilidades” de que ocurriera. A las 11, se lo confirmaron habilitándoles una mesa para el encuentro. 40 minutos después Sánchez ya estaba ahí.
– Apoyaremos a Juan Guaidó siempre y cuando convoque unas elecciones libres y competitivas.
Sánchez repitió este mensaje hasta en cuatro ocasiones. Se lo cuenta a ALnavío un testigo directo de aquella reunión. Carlos Valero, diputado venezolano por Un Nuevo Tiempo, y único parlamentario venezolano que se reunió con el presidente español. Le acompañó otro opositor, no parlamentario: Mauricio Poler, secretario de Relaciones Internacionales de Acción Democrática, el primer partido venezolano en unirse a la Internacional Socialista.
“Si hubiéramos tenido más tiempo habríamos hecho un mayor esfuerzo para que más diputados estuvieran en la reunión”, explica Valero.
Los contactos con el PSOE
El diputado llegó el domingo a República Dominicana. En la capital, Santo Domingo, tuvo lugar el Consejo de la Internacional Socialista, una organización global compuesta por más de 130 partidos socialdemócratas, y cuya agenda en este encuentro estaba marcada por el populismo y la libertad, temas de actualidad en una Venezuela más revuelta que nunca.
Desde el domingo Valero supo que Sánchez iría a Santo Domingo. Fue entonces cuando contactó con los dirigentes del PSOE para lograr el encuentro. Personalidades como Alejandro Dorado y Héctor Gómez. Este último, secretario de Relaciones Internacionales del partido y miembro de la comitiva que el presidente llevó a Santo Domingo.
Carlos Valero: “Uno de los grandes problemas de Venezuela es que el CNE está parcializado. La presidenta Tibisay Lucena está claramente vinculada a Maduro. Viste de rojo y participa en los actos del partido del Gobierno”
“No fue fácil, ya que desde el primer momento nos dijeron que la agenda de Sánchez era muy apretada, y sería difícil conseguir un espacio”, comenta Valero.
Sin perder la esperanza, pero consciente de que era complicado mantener un cara a cara con el presidente, salió el lunes al Consejo de la Internacional Socialista con las ideas claras: exponer la crisis venezolana para lograr un consenso entre los participantes y que saliera la resolución conjunta.
Valero lo consiguió. Convenció al socialismo mundial de que Nicolás Maduro es un tirano. De que el pueblo está sufriendo. Y de que hacía falta una solución. En paz. Sin intervencionismo extranjero. Sin derramamiento de sangre. Con elecciones libres y democráticas.
No fue la única victoria del diputado. El otro triunfo llegó el martes, cuando a las 9 de la mañana desde el PSOE le dijeron que había “altas probabilidades” de que el presidente se reuniera con él. Todo cambió en un instante.
A las 11 llegó la confirmación definitiva y 40 minutos después el presidente español, acompañado por el canciller de República Dominicana, Miguel Varas, se sentó en la mesa que les habilitaron en el foro de la Internacional Socialista.
La conversación con Sánchez
Lo primero que hizo Sánchez, “cercano, respetuoso y muy consciente” de la crisis que vive el país latinoamericano, fue celebrar la resolución de la Internacional Socialista sobre Venezuela, la cual se redactó con base en el discurso de Valero.
– Expresa justamente la posición que tenemos en España y en Europa, le dijo Sánchez al diputado.
La reunión con el presidente duró 15 minutos y no fue un monólogo. La oposición tuvo un papel activo en la conversación. Primero le aclaró la hoja de ruta de Guaidó: fin de la usurpación, gobierno de transición y finalmente lo que pide Sánchez: realización de elecciones libres y democráticas con el aval de las Naciones Unidas y de la Organización de Estados Americanos.
Valero insistió mucho en este segundo punto. El gobierno de transición. “Uno de los grandes problemas de Venezuela es que el CNE [Consejo Nacional Electoral] está parcializado. La presidenta Tibisay Lucena está claramente vinculada a Maduro. Viste de rojo y participa en los actos del partido del Gobierno”, explica.
Agrega que resolver esta parcialización requiere tiempo. “Un semestre, tres trimestres”. Unos nueve meses para que se concrete un proceso democrático, que, insiste, contará con el debido aval internacional, la participación de todas las fuerzas políticas, incluido el chavismo, y con observadores externos como bien puede ser la Unión Europea.
Sánchez suscribió cada palabra. Entendió que necesiten tiempo. Por tanto, se puede decir que oposición y presidente se alinearon. En este sentido, Valero le trasmitió el deseo de que en España también ocurra igual. Que Gobierno y oposición fijen una línea común para Venezuela.
– Es difícil, reconoció Sánchez.
El presidente hizo mención de la situación política de España. Dijo que desde el Gobierno no quieren que Venezuela se convierta en un asunto de debate interno ya que sus esfuerzos van dirigidos a lograr una solución pacífica al problema.
El antídoto de Europa
Valero está de acuerdo con lo que expresó el presidente. Y también con la respuesta de la Unión Europea. En concreto con la propuesta del eje Madrid–Berlín–París, al que luego se sumó Londres.
Estos países dieron a Maduro un plazo de ocho días para que convoque elecciones libres. Si no, reconocerían a Guaidó como presidente interino de Venezuela. Este plazo termina el domingo, y todo apunta a que la intención de Maduro es no convocar comicios.
“Esta respuesta de la UE es la forma en la que los europeos hacen las cosas. Claro que hubiera sido mejor que reconociera a Guaidó inmediatamente, pero en ningún caso es un balón de oxígeno a Maduro. Es simplemente el antídoto de Europa para esta crisis”, afirma Valero.
El diputado notó el apoyo de Sánchez. “Sentimos que estamos haciendo lo correcto. Sentimos el consenso de que Maduro es ilegítimo. El consenso de que la crisis que sufre Venezuela es terrible. De que la Asamblea Nacional es la que tiene que resolver el conflicto como órgano elegido democráticamente. Y que Juan Guaidó es quien tiene que liderar esta transición”.
El socialismo contra Maduro
Esas fueron las impresiones de Valero tras la reunión de Sánchez. Encuentro al que finalmente no acudió nadie de Voluntad Popular, el partido de Guaidó.
El socialismo mundial carga contra Maduro
“Desafortunadamente no pudieron llegar. Para todos es muy complicado viajar. Primero por la agenda, y segundo porque cada vez que uno viaja, tenemos el temor de que te quedes sin pasaporte, de que te detengan”, explica el diputado.
Valero sintió el apoyo de Sánchez, y luego el de sus compañeros socialistas. Cada instante que pasó en Santo Domingo así lo sintió. Nadie se opuso a su discurso. Tampoco al posterior comunicado. Ni siquiera Alexander Romanovich, vicepresidente de la Internacional Socialista y miembro de Rusia Justa, partido que apoya al gobierno de Vladimir Putin, quien es uno de los pocos aliados internacionales que le quedan a Maduro.
Al respecto de Putin, Valero se muestra preocupado por la llegada de al menos 300 soldados rusos cuyo único fin es apoyar a Maduro. “Luego es él quien habla de intervencionismos”, aclara.