Caleb Zuleta (ALN).- La investigación es del FMI. Que se pregunta: “¿Cómo reaccionan los inversionistas ante las noticias?”. No es nueva la pregunta. Pero “dos fuerzas” la ponen otra vez “en primer plano”. ¿Cuáles? ¿Y qué ocurre?
Para el FMI, la innovación tecnológica y la apertura de mercados en distintos países, colocan otra vez en el tapete el debate de cómo influyen las noticias en los precios internacionales, en los inversionistas. La tecnología ha provocado que las noticias se transmitan y se reciban en tiempo real. Y a gran velocidad. “Los medios informativos en tiempo real como Reuters y Bloomberg generan y difunden información de manera casi instantánea a un grupo cada vez mayor de agentes”, señala el FMI. Luego, la apertura de mercados en economías emergentes, hace que “las noticias procedentes del extranjero afectan las condiciones de los mercados locales de manera mucho más directa”.
Así está el escenario. Y sobre ello trabajaron los investigadores. Poniéndole el foco a las noticias negativas y a las positivas. Estados de ánimo. El FMI explica el método que usó: “Basándonos en las últimas tecnologías, nuestro proyecto de investigación evaluó el papel de las noticias en los precios internacionales de los activos usando más de 4 millones de artículos económicos, financieros, empresariales y políticos publicados por Reuters a nivel mundial entre 1991 y 2015. El proyecto evaluó si el tono de cada artículo era optimista o pesimista, mediante técnicas de minería de textos que identificaron términos positivos como ‘avances’, ‘recuperación’ o ‘confianza’, y términos negativos como ‘crisis’, ‘pérdidas’ o ‘caída’”.
El FMI observó “que las variaciones repentinas del ánimo expresado en las noticias tuvieron un impacto significativo en los precios internacionales de los activos, lo cual confirma que, en términos generales, el tono que usan los medios de comunicación constituye una representación muy fidedigna de los ánimos de los inversionistas. Asimismo, esto pone de relieve la influencia que ejercen las noticias (y los inversionistas) extranjeras -en lugar de las noticias (y los inversionistas) locales- en los precios locales de los activos. (Al hablar de las noticias extranjeras, nos referimos a las noticias que tienen que ver con varios países y sus interrelaciones, en contraposición a las noticias locales que conciernen a un solo país.)”.
Señala también que “aunque el optimismo repentino de las noticias internacionales produce un impacto fuerte y permanente en los precios de los activos a nivel mundial, su impacto en las noticias locales es más moderado y no es más que pasajero. Desde un punto de vista técnico, el estudio ofrece otro ejemplo del poder de la palabra como insumo de la investigación económica y financiera de avanzada”.