(EFE).- El presidente de Argentina, Alberto Fernández, apostó este viernes, al asumir la presidencia pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), por un grupo en el que se fomente la integración y la búsqueda de consensos, así como el respeto por la diversidad y «sin exclusiones».
«Me siento inmensamente honrado por la confianza que han depositado en Argentina al encomendarle el ejercicio de la presidencia pro tempore de la Celac», empezó diciendo el mandatario al participar de la reunión en Buenos Aires en la que los cancilleres de los países del grupo eligieron por consenso a Argentina para liderar el bloque en 2022.
Según señaló Fernández, esa «confianza» es «un reconocimiento de que Argentina es capaz de articular diálogos, consensos» y a la vez como «un mandato de darle la institucionalidad a la Celac».
«Recojo este desafío con la convicción de quien cree en que todos somos parte de una patria grande que nos une, aunque muchos hacen lo imposible por dividirnos y consecuentemente someternos con facilidad» sentenció.
INTENSAS NEGOCIACIONES
Esta elección se da tras meses de intensas conversaciones con los países miembros por parte del Gobierno de Argentina, único candidato para liderar el organismo, luego de que en la cumbre de presidentes de septiembre pasado no lograra el consenso necesario.
La Celac, creada en 2010 e integrada por una treintena de países, vivió en 2020 cómo Brasil decidía desvincularse al considerar que el organismo apoya a «regímenes no democráticos» como los de Cuba, Venezuela y Nicaragua.
Entre los asistentes a la cita de este viernes están los cancilleres de Cuba, Venezuela y Nicaragua, países cuestionados por Estados Unidos y la Organización de Estados Americanos (OEA) por presuntas violaciones a los derechos humanos.
Sin referirse a esa cuestión, el presidente argentino remarcó que la «Celac no nació para oponerse a alguien» ni para enfrentarse «a alguna de las instituciones ya existentes» o «para inmiscuirse en la vida política y económica de ningún país».
«La Celac nació como un foro en favor de nosotros mismos, que siempre promovió el consenso y la pluralidad en un marco de convivencia democrática sin ningún tipo de exclusiones», aseveró.
DESIGUALDAD
En su discurso, Fernández lamentó que cuando la covid-19 apareció, América Latina ya era el continente más desigual del mundo, el que registraba mayor brecha en los ingreso de ricos y pobres, diferencias que consideró «se han profundizado» con la pandemia.
«Con tanta desigualdad la democracia parece vacía de contenido y la libertad la disfrutan más quienes acceden a la centralidad social que quienes viven en los márgenes de la sociedades», añadió.
Ante los ministros presentes, Fernández hizo hincapié en que México, que ostentó hasta hoy la presidencia pro tempore desde enero de 2020, la llevó adelante «en condiciones de extrema dificultad por la pandemia y la crisis», pese a lo que logró «revitalizar» una Celac que a su juicio está hoy «mas viva y fortalecida que nunca».
En cuanto al programa que llevará adelante Argentina, el mandatario propuso trabajar sobre 15 objetivos, aunque llamó a que no sean los únicos, entre ellos relacionados con las estrategias sanitarias, la recuperación económica, la gestión de riesgos en situaciones de desastre y la seguridad alimentaria.
Pero también la cooperación aeroespacial y ciencia y tecnología aplicadas a la innovación social, la cuestión del cambio climático y la discusión de estrategias que permitan concertar posiciones ante organismos financieros internacionales y regionales.
En este sentido, Fernández agradeció el apoyo que Argentina ha recibido de parte de los cancilleres en la negociación que el país está llevando con el Fondo Monetario Internacional, para refinanciar la deuda que tiene con el organismo por más de 40.000 millones de dólares.
También dio las gracias por el apoyo a Argentina en el histórico enfrentamiento con Reino Unido por la soberanía de las islas Malvinas.
«No hay límites para la integración, la búsqueda de consensos será nuestro mandato primordial, y el respeto por la diversidad nuestra guía rectora», concluyó.