(EFE).- El presidente de Argentina, Alberto Fernández, prometió este miércoles acelerar los tiempos de vacunación contra la covid-19 y aseguró que su principal preocupación está en que los salarios de los trabajadores «le ganen a la inflación». Al encabezar el acto de apertura del 48 Congreso Nacional Bancario, Fernández afirmó que su Gobierno vacunará «con la mayor velocidad posible», al «mayor número» de argentinos que se pueda.
Hasta ahora, el 32,48 % de la población argentina ha sido vacunada con una dosis y el 8,2 % con las dos.
Por otro lado, el mandatario también agregó que lo que más le importa es que el sueldo «no se retrase» y le gane «a la inflación», que en mayo pasado fue del 3,3 %, con un alza interanual del 48,8 %.
«Estamos saliendo de la pandemia, pero todavía no logramos salir del todo de la tragedia que significaron los cuatro años que nos precedieron en la gestión», expresó Fernández en referencia al Ejecutivo de Mauricio Macri, que gobernó entre 2015 y 2019, durante el que se desató, en 2018, una recesión que aún dura.
Fernández hizo referencia a la dificultad para enfrentar la crisis sanitaria por el coronavirus por la herencia económica que a su juicio dejó la gestión anterior.
«Dejaron vencer vacunas, volvió el sarampión, hicieron desaparecer el Ministerio de Salud y quitaron recursos a la salud y a la educación», criticó el presidente.
Por último, dijo que su Gobierno «tiene un plan, que es cuidar a los argentinos», y aseveró que a la oposición, el bloque de Juntos por el Cambio, «no le gusta ese plan, porque el plan que les gusta a ellos es ajustar».
Estas declaraciones se producen cuando restan menos de cinco meses para que Argentina celebre elecciones legislativas, en las que se renovarán 127 de 257 escaños en la Cámara de Diputados y 24 de 72 escaños en la de Senadores y que serán las primeras de Fernández como presidente.