Redacción (ALN).- Tanto el presidente cubano Raúl Castro como su canciller, Bruno Rodríguez, apoyaron la Constituyente en Venezuela y cargaron contra la comunidad internacional que repudia los actos del régimen de Maduro.
Alza la voz el principal aliado del régimen de Venezuela. El presidente de Cuba, Raúl Castro, felicitó al mandatario Nicolás Maduro por la instalación de la Asamblea Nacional Constituyente. La noticia -expresó Castro en una carta publicada en Granma, órgano oficial del partido comunista cubano- causó en él un “inmenso júbilo revolucionario”. Asegura que “la demostración de respaldo popular” fue “clara y rotunda” y tiende la mano a Maduro para colaborar: “Vendrán días de fuerte lucha, de acoso internacional, de bloqueos, de limitaciones; pero también serán días de creación y trabajo para los revolucionarios y todo el pueblo venezolano que, como hasta hoy, no estará solo y nos tendrá a los cubanos, en la primera fila de la solidaridad militante y más comprometida con su causa”. Al mismo tiempo que Castro, el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, defendió los resultados de la Constituyente y cargó contra la comunidad internacional que repudia los actos de Nicolás Maduro y el grupo que lo respalda. “Saquen las manos de Venezuela todos aquellos que hacen injerencia, intervención y proclaman propósitos cínicos o hipócritas”, manifestó en un acto en Caracas del que se hizo eco la agencia Europa Press. Mientras el aliado del régimen les apoya, la Asamblea Constituyente da sus primeros pasos. En la sesión del miércoles, los diputados de Nicolás Maduro allanan la reescritura de una nueva Carta Magna que de plenos poderes al Parlamento oficialista. Lo dijo Aristóbulo Istúriz, primer vicepresidente de la nueva cámara, en unas declaraciones recogidas por el diario El País de Madrid: “Los organismos del poder público están obligados a cumplir los actos jurídicos que emanen de la Constituyente».
