Alonso Moleiro (ALN).- Andrés Manuel López Obrador, el controvertido líder de la izquierda mexicana, el que alguna vez se apostó en el Zócalo de Ciudad de México para protestar la condición de candidato derrotado, aquel al que nadie le dio mucho crédito hasta hace unos años, parece remar feliz hacia el triunfo electoral que finalmente lo convierta en presidente de México. La cuenta de Twitter de AMLO suma fotos de mitines multitudinarios y alterna los testimonios de sus giras con los números en las encuestas, que le sonríen ampliamente.
De acuerdo con lo que afirman todas las encuestas, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), el líder de Morena, al frente de la coalición Juntos Haremos Historia, parece encaminado hacia la Presidencia de México en las elecciones del próximo 1 de julio.
Se prepara para conquistar el poder en un tiempo particularmente aciago para el país, con una sociedad que parece penetrada por el crimen organizado, en un ambiente de desaliento, corrupción y con una clase política cuestionada desde todos los frentes.
La cuenta de Twitter de AMLO, a estas alturas, está volcada a producir entre los visitantes esa sensación: que, a diferencia de lo que ocurrió en citas electorales anteriores, el poder no se le escapará esta vez de las manos. Al candidato le gusta retratarse formulando acusaciones a los políticos de los partidos tradicionales. Con poco más de 3.000 tuits, que son más bien pocos, ofrece un rotundo saldo de tres millones de seguidores. Casi todos sus “posteos” parecen encaminados a consolidar el ánimo festivo: mitines multitudinarios, giras interminables por todos los rincones del país, nuevos pronunciamientos de apoyo, reuniones familiares.
Este tuit ofrece un contrapunto personal y tiene, después de todo, un indiscutible encanto.
Después de 20 días de campaña tengo tiempo para estar en la casa, y pegar estampitas que le traje a Jesús de la gira por el norte. pic.twitter.com/sJlcKHpBPI
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) 21 de abril de 2018
Por lo demás, lo que ofrece el buzón en el tiempo reciente de López Obrador son las noticias de recorridos por la geografía de México. El candidato de la izquierda, que ha sido objeto de duras campañas en su contra en esta y otras ocasiones, quiere ofrecer la sensación de que no habrá fuerza humana que pueda interponerse a su llegada al poder en la segunda economía más poderosa de Latinoamérica.
Sinaloa no podía ser la excepción, también aquí la gente participa entusiasmada y feliz por el cambio que está por llegar.
Miren los actos que tuvimos en Los Mochis, Guasave y Guamúchil.
Terminamos gira de 6 días por el norte del país. Mañana Milpa Alta y Xochimilco. pic.twitter.com/gSSMaYsNTt— Andrés Manuel (@lopezobrador_) 19 de abril de 2018
Vean cómo cerramos la jornada el día de hoy en Ciudad Obregón, Sonora. Como lo repite aquí la gente «ahora sí» o como lo dice la canción de Amaury Pérez ‘No lo van a impedir’. pic.twitter.com/iCgHgmsNsm
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) 18 de abril de 2018
En este tuit responde a acusaciones personales hechas en su contra por el candidato del PRI y de la coalición Todos por México, José Antonio Meade. Acá también transpira la calma existencial por la comodidad observada en las encuestas.
Meade, además de tapadera, es un calumniador. Anexo las pruebas para demostrar que los «tres departamentos» no son míos. https://t.co/KuqF9FNBRK Él ya lo sabía, pero anda muy nervioso, lo comprendo.
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) 25 de abril de 2018
La mafia del poder está al borde de un ataque de nervios, no les ha funcionado ni les funcionará la guerra sucia. Hagan lo que hagan no dejamos de crecer. Miren esta encuesta. pic.twitter.com/fcAX2YYecz
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) 16 de abril de 2018
De ganar finalmente las elecciones, ya le llegará a este líder, como a otros de su condición, el tiempo de metabolizar el contenido del discurso y el tono de las redes sociales, de candidato que promete futuro, denunciando lo punible, a presidente que se disculpe con las masas, circunscrito apenas a lo realizable.