Daniel Gómez (ALN).- Un accionista preguntó a la presidenta del Grupo Santander por la inversión de 685 millones de euros en la filial mexicana. La respuesta de Botín, como ya sucedió en la presentación de los resultados de 2016, no cambió ni un ápice. Asegura que tienen buenas previsiones para este año. Misma pregunta, misma respuesta. Un accionista aprovechó la junta anual para consultar a la presidenta del Grupo Santander, Ana Patricia Botín, sobre la inversión de 685 millones de euros (aproximadamente 728 millones de dólares) que el banco realizó en su filial de México pese a las amenazas proteccionistas de Donald Trump. Y ella contestó: “Confiamos en ese mercado, los resultados en 2016 fueron buenos, y también tenemos buenas previsiones para 2017”.
Esta pregunta también se la hicieron en la presentación de resultados de 2016, cuando anunció dicha partida. Al igual que este viernes, la banquera aludió al último ejercicio financiero, en el que Santander México facturó 169 millones de euros (unos 179 millones de dólares). Cifras que espera mantener y mejorar con esos 685 millones que descansarán en mejoras logísticas -ampliando la red de sucursales- y tecnológicas.
Invertir en tecnología hoy es asegurarnos el futuro de mañana”, aseguró Botín
Como se ha podido comprobar, estas palabras no se las llevó el viento y el país azteca empieza a experimentar la mejora tecnológica. Ante los accionistas, Botín anunció el lanzamiento de Santander Wallet para México: “Nuestra aplicación permite pagar en comercios a través del móvil. Más de 40.000 clientes en España y Brasil se benefician del servicio y pronto estará disponible en México y Chile”.
Demostrando su apuesta por la digitalización
Cuando Ana Patricia Botín recogió el testigo de su padre, Don Emilio, la digitalización fue el camino que eligió para llevar al banco a lo más alto. Santander Wallet o Apple Pay solamente son la cara visible de unas políticas que también llegaron a las oficinas. Tal como confirmaron al diario ALnavío directores de la sucursal, los procesos internos se han agilizado gracias a las herramientas digitales.
“Invertir en tecnología hoy es asegurarnos el futuro de mañana”, dijo Botín antes de presumir de las partidas anuales -cuyo monto ascienden a 1.900 millones de euros (2.027 millones de dólares)- que destinan a este ámbito. Se trata de un objetivo que la entidad atacará desde tres frentes:
- El relanzamiento del banco digital Openbank.
- Santander Digital y el fondo Santander InnoVenures, que cuenta ya con una capacidad inversora de 200 millones de euros (212 millones de dólares).
- Transformar los productos y servicios tradicionales.
Sobre este último punto citó como ejemplo la ContaSuper de Santander Brasil, una cuenta digital y tarjeta para los no bancarizados. El país suramericano es uno de los ejes de negocio del banco. Por eso no extraña que se refiriera a él cuando se detuvo a defender el modelo geográfico de Santander.
Botín aseguró que la estrategia de estar en economías emergentes y maduras en Europa, Estados Unidos y Latinoamérica, les aporta equilibrio. “A lo largo de estos años hemos ido viendo como nuestros negocios en España, Reino Unido y Brasil han ido alternándose como mayor aportador a los beneficios del grupo. Como consecuencia, nuestros resultados son más estables y predecibles, lo que reduce la necesidad de capital respecto a nuestros competidores”, remató.
