María Rodríguez (ALN).- Los turistas chinos que viajan a España lo hacen con un presupuesto ajustado. Prefieren destinarlo más al ocio y la cultura gastronómica que a compras de lujo. Esas las reservan sobre todo para Francia e Italia. Estas son algunas de las conclusiones de un informe sobre el turismo de compras elaborado por Planet, proveedora internacional de servicios de pago y tecnología Tax Free.
El perfil del turista chino en España ha cambiado. Antes viajaban únicamente los de poder adquisitivo muy alto. Ahora, el volumen de chinos que visitan España aumenta, pero por el despunte de la clase media. Un segmento de la población al que le gusta viajar, aunque “con un presupuesto ajustado, dirigido más hacia el ocio y la cultura gastronómica que hacia las compras de lujo”. Así lo explicó en la presentación de un informe sobre el turismo de compras Jorge Esteban, gerente para España de Planet, proveedora internacional de servicios de pago y tecnología Tax Free.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística de España, 514.777 turistas chinos visitaron este país en 2017. En 2018 la cifra subió 26%, hasta los 649.033. Por otro lado, de todas las compras Tax Free que se realizaron en España el último año (a las que se devuelve el Impuesto de Valor Añadido), 27% las acapararon los turistas procedentes de China, lo que supuso 5% menos respecto a 2017. En otras palabras, que a España llegan más turistas chinos, pero gastan menos.
«En 2018 se ha detectado un cambio en el perfil y hábitos de este viajero asiático, que en España busca más disfrutar de una experiencia gastronómica, cultural y del patrimonio histórico y natural y reservar su presupuesto destinado a compras de lujo a países vecinos como Francia e Italia»
Así lo explican desde la firma: “En 2018 se ha detectado un cambio en el perfil y hábitos de este viajero asiático, que en España busca más disfrutar de una experiencia gastronómica, cultural y del patrimonio histórico y natural y reservar su presupuesto destinado a compras de lujo a países vecinos como Francia e Italia, posicionados fuertemente en el sector de las compras de alta gama”.
Eso se constata también en la factura media de cada turista chino en compras libres de impuestos (en las que no están incluidos los hoteles ni restaurantes). En España esta factura está en torno a los 629 euros, según el informe de Planet. Mientras, en Italia y Francia supera los 1.200 euros para la generación de baby boomers chinos (nacidos entre 1946 y 1964), los 1.500 euros para los millenials y los 1.800 euros para la generación z (posmillenials).
Por otro lado, Esteban subrayó que “el turista que viene a España, especialmente el chino, exige repensar la oferta en el sector retail (comercios), adaptándola hacia un perfil más experiencial y que, aunque sigue siendo amante de las compras, valora otros aspectos y es necesario seducirle. Conociendo sus gustos y preferencias seremos capaces de llegar a ellos con un producto y una experiencia más adecuada a su realidad”.
Asimismo, desde Planet destacaron la importancia de las conexiones aéreas directas entre China y España para que haya aumentado el número de turistas asiáticos. Recordaron que en 2017 había 23 conexiones semanales entre ambos países y pasaron a ser 32 en 2018. Para 2019 la estimación es que operen 39 vuelos directos con compañías como Air China, Iberia, China Eastern, Capital Airlines, Cathay Pacific, Hainan Airlines y China Southern Airlines.
¿Cómo es el turista chino?
Según el perfil elaborado por Planet, 63% de los turistas chinos que viajan a España son mujeres frente a 37% de hombres. La mayoría (53%) tiene entre 40 y 60 años.
¿Y con quiénes viaja? 89% lo hace con amigos y lo planean ellos solos, sin necesidad de acudir a una agencia de viajes. Lo que más les gusta hacer en vacaciones en España es, en este orden: explorar la ciudad, la naturaleza, visitar museos, ir de compras y comer.