Redacción (ALN).- El Fondo Monetario Internacional tiene claro que Brasil necesita modernizar la contratación pública, eliminar barreras a las inversiones extranjeras, priorizar proyectos según las necesidades del país y mejorar la transparencia y la coordinación entre el gobierno federal y los regionales.
En Brasil, tanto el nivel como la eficiencia de la inversión pública están rezagados respecto a los países de la región. Según subraya el Fondo Monetario Internacional en un artículo, entre 1995 y 2015 el gasto en inversión pública en Brasil representó en torno a 2% del Producto Interior Bruto (PIB) frente a 6,4% en los mercados emergentes y 5,5% en los países latinoamericanos.
Al mismo tiempo, la brecha en la eficiencia de la producción de infraestructuras entre Brasil y los países más eficientes ronda 39%. El promedio de esta brecha en los mercados emergentes es sustancialmente más bajo: 27%, y en América Latina 29%.
¿Qué se puede hacer al respecto? El FMI hace seis recomendaciones que potenciarían el rendimiento socioeconómico de la inversión pública en el Brasil de Jair Bolsonaro. Son estas:
1– “Mejorar la flexibilidad presupuestaria y elaborar un presupuesto a medio plazo que afiance la previsibilidad y la planificación de la inversión pública”.
Dadas las limitaciones del entorno fiscal, no hay mucho margen para la inversión pública en el presupuesto de 2019. Ahora bien, el FMI recuerda que la mayoría de los proyectos de inversión son a medio plazo, y eso hay que tenerlo en cuenta a la hora de elaborar futuros presupuestos.
2- “Optimizar la fijación estratégica de prioridades de inversión pública y elaborar una cartera de proyectos de gran calidad ordenados por prioridad”.
Según el FMI, Brasil necesita formular una estrategia de inversión nacional con objetivos estratégicos amplios. Ahí se incluiría una cartera de grandes proyectos y de alta calidad ordenados según las prioridades nacionales. En este contexto también sería importante mejorar la transparencia de la selección y evaluación de los proyectos.
3- “Mejorar la coordinación entre el gobierno federal y los gobiernos subnacionales en cuanto a la planificación de la inversión y el examen de los mecanismos de financiamiento”.
El FMI insta a Brasil a un “mejor equilibrio” entre la necesidad de supervisión federal y la transferencia de más responsabilidades a los gobiernos subnacionales.
4- “Afianzar y uniformar los procedimientos de preparación, evaluación y selección de proyectos y codificarlos legislativamente”.
El gobierno debería establecer pautas centrales para uniformar los procesos de evaluación de proyectos a fin de aplicarlos a todas las inversiones de capital. Esa es la visión que defiende el FMI.
5- “Potenciar las capacidades de gestión de proyectos y la rendición de cuentas”.
El FMI explica que el gobierno de Bolsonaro necesita preparar un decreto público que asigne responsabilidad por la gestión de los proyectos de inversión pública a determinados administradores. También debe elaborar “pautas exhaustivas” de gestión de proyectos para todo el gobierno.
6- “Modernizar la contratación pública y mejorar la transparencia”.
Desde el FMI recuerdan que es importante actualizar el marco de contratación pública para grandes proyectos eliminando las barreras a la participación extranjera. Así se ganará en competitividad y esto ayudará a abordar prácticas de corrupción y licitaciones fraudulentas.