Daniel Gómez (ALN).- “Ya que los riesgos continúan siendo numerosos”, tanto a nivel externo como interno, BBVA Research proyecta un crecimiento para España de 2,2% en 2019 y de 1,9% en 2020. Dos décimas menos de lo previsto hace tres meses para cada ejercicio.
La incertidumbre amenaza a la economía de España. Lo dice el equipo de investigación del banco español BBVA, BBVA Research, en el informe sobre la economía nacional publicado este lunes.
– Existe incertidumbre por “el ciclo electoral”.
– Por la menor demanda en industrias “clave como la automotriz y la del turismo”.
– Por la decisión del gobierno de Pedro Sánchez de aumentar el salario mínimo que impacta “en el empleo y la inversión”.
– Por las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China.
– Por la incierta solución del Brexit y el debilitamiento de las principales economías de la Unión Europea, que están frenando la expansión de las exportaciones españolas.
“Ya que los riesgos continúan siendo numerosos”, tanto a nivel externo como interno, BBVA proyecta un crecimiento para España de 2,2% en 2019 y de 1,9% en 2020. Dos décimas menos de lo previsto hace tres meses para cada ejercicio, lo que indica un ciclo de menor crecimiento para los próximos años.
“Este escenario se da en un entorno donde se espera una recuperación progresiva de la demanda global, la prolongación del tono expansivo de la política monetaria, el mantenimiento de precios del petróleo relativamente bajos y la resolución favorable de distintos focos de incertidumbre. En todo caso, y a pesar de la revisión de las perspectivas de crecimiento a la baja, el sesgo sobre las previsiones sigue siendo negativo, ya que los riesgos continúan siendo numerosos y la probabilidad de que ocurran algunos va en aumento, especialmente a partir del segundo semestre de 2019 y 2020”, explica BBVA Research en su informe.
“Sólido primer trimestre”
No todo son malas noticias. En los tres primeros meses de 2019 la economía mantuvo “el sólido crecimiento mostrado a finales del año pasado gracias al buen comportamiento del consumo privado y del gasto público”, dice BBVA.
Luego el incremento del gasto de las familias en más de 2%. Este “se estaría beneficiando de la financiación al consumo”, el cual “sigue creciendo a tasas de dos dígitos, mientras que el ahorro continúa en niveles históricamente bajos”.
La construcción -que crece por encima de 5%, especialmente la construcción no residencial- permitió a España mantener el crecimiento en el primer trimestre de 2019 a un ritmo sólido. Para este caso concreto, detalla BBVA, la clave está en el estímulo fiscal del Gobierno.
Un crecimiento temporal
La economía de España ahora avanza de forma sólida. ¿Seguirá igual el resto del año? Eso es lo que BBVA Research no se atreve a afirmar. A la incertidumbre interna y externa se suma “la débil e irregular evolución de la inversión privada y de las exportaciones”.
También el hecho de que las medidas que ahora hacen crecer a España dejen de ser efectivas en la segunda mitad del año. Ahora el salario mínimo da más capacidad de consumo a los españoles. Sin embargo, este se convierte en una traba para la contratación, y, en consecuencia, en una traba para el empleo.
“El efecto positivo del aumento sobre la demanda probablemente irá en descenso a medida que el impacto negativo sobre el empleo aumente durante los próximos meses”.
Los estímulos fiscales a la construcción, que hasta ahora habían sido positivos, no se sabe si continuarán. “A este respecto, sin la aprobación de medidas que puedan continuar con el tono expansivo y dado el periodo de elecciones generales, locales y regionales de los próximos meses, la economía se enfrenta a un ajuste fiscal durante la segunda parte del año”.
Por último, BBVA considera que “es posible que se produzca una desaceleración en el crecimiento del consumo”. El motivo es “el agotamiento de la demanda embalsada durante el periodo de crisis, las relativamente bajas tasas de ahorro de las familias, y la posibilidad de ir observando rendimientos decrecientes al encontrar demanda de crédito solvente”.