Daniel Gómez (ALN).- Ganar dinero con las criptomonedas no es para nada fácil. Son activos muy volátiles, por lo que lidiar con las emociones es fundamental. Trazar un plan, así como sellar a cal y canto las inversiones son algunos de los consejos que ofrecen expertos del sector consultados por el diario ALnavío. Consejos que serán inútiles si el usuario no entiende el concepto de criptomoneda.
Bitcoin, ethereum, litecoin, ripple… las criptomonedas son una excelente oportunidad de inversión. Eso está tan claro que hasta la revista Forbes elaboró un listado de “criptorricos”. Pero que sea una obviedad no significa que invertir en ellas sea fácil.
Son activos de alto riesgo y complicados de entender. Por esto último hay que empezar. O se entiende el concepto de criptomoneda o la inversión está perdida desde el principio. Por eso, todos los expertos recomiendan, como mínimo, un fin de semana de estudio.
Si en ese fin de semana el usuario comprendió qué son las divisas digitales y cuál es su funcionalidad, entonces es momento de aplicar estas cinco reglas que indicaron al diario ALnavío Daniel García, analista de la casa de Bolsa XTB, e Ignacio García Medina, fundador y director de Walamax, consultora especializada en criptomonedas.
1. Trazar un plan
Invertir no es una aventura. Hay que planificar cada detalle. Tener una estrategia y ceñirse a ella. A esto el analista de XTB lo llama “definir el horizonte temporal”. En este sentido, advierte: “Lo que no vale es querer comprar bitcoin de aquí a una semana. Entonces, como veo que va perdiendo, en vez de una semana lo aguanto un año. Eso no lo puedes hacer”.
El motivo, explicó García, es que, si el horizonte temporal es de corto plazo, así debe seguir siéndolo. “No vale cambiarlo como medida de inmunización. Hay que ceñirse al plan y adentrarse en el mercado con los objetivos muy claros”.
2. Diversificar
Como ocurre con cualquier inversión, diversificar es una manera de minimizar riesgos. En el mercado hay 2.000 criptomonedas diferentes. Desde el bitcoin, que es la pionera –su precio en estos momentos es de 10.500 dólares-, hasta divisas digitales que son directamente un chiste. Véase los casos de pesetacoin y weedcoin.
Por eso hay que tener cuidado, y a la hora de invertir, fijarse en aspectos que van más allá del precio y la tendencia. “En coinmarketcap.com se puede ver la información de cada moneda. El equipo de personas que hay detrás, los proyectos que desarrollan, foros en los que se habla de ella, sus redes sociales… Todo esto es importante, pero el factor clave es el equipo humano”, apunta el jefe de Walamax.
En este sentido, Medina cita un caso reciente. El del litecoin. “Anunciaron recientemente que el 26 de febrero sacarán litepay, un sistema por el cual los comercios pueden aceptar fácilmente litcoin y cambiarlos a su moneda local si quieren. Los usuarios pueden gastar directamente en litecoin o usar la tarjeta visa de litepay en euros, que es recargable desde litecoin, y la puedes usar como tarjeta de débito en cualquier comercio que acepte visa”.
3. Cuidado con las emociones
Los inversores son personas, y como tales, es importante lidiar con las emociones, con la euforia y el pesimismo. Se trata de no perder la cabeza ni tampoco el dinero. “Las divisas digitales premian a los pacientes. El inversor convencido aprovecha las bajadas para adquirir más monedas y sólo vende cuando sube mucho. Si es que vende, claro”, subraya Medina.
En vista de los diferentes inversores, en el universo de las criptomonedas se ha creado una especie de jerga. Hodl (escrito mal adrede) es un término propio del mundillo. Hace referencia al verbo inglés aguantar (Hold). “El hodler es aquella persona que mantiene su inversión en cripto, e incluso la incrementa, contra viento y marea”, dice el director de Walamax.
Luego están las ballenas, es decir, los grandes inversores, los más curtidos y los que se aprovechan del miedo de los novatos para comprar criptomonedas a bajo precio. Estas bajadas también tienen su terminología: dip.
4. Proteger la inversión
Las criptomonedas descentralizadas, como es el caso del bitcoin, permiten un uso único y exclusivo. Otorgan libertad, tanto para lo bueno como para lo malo. Imagine entonces que tiene un bitcoin. Lo compró por 6.000 dólares y ahora está en 10.000. Entonces pierde la contraseña –también llamada semilla- de su cartera digital. ¿Qué pasa? Que lo pierde todo.
Como explica Medina, la contraseña de las criptomonedas suele ser una combinación de entre 12 y 24 palabras aleatorias en un orden concreto, “imposible de descifrar”, las cuales son “el único certificado de titularidad”.
“Lo recomendable es guardarla uno mismo en un papel. Incluso en una caja de seguridad. Importante no sacarle foto, ni digitalizar ni guardar en tu ordenador ni, por supuesto decírsela a nadie. Si la pierdes, no se puede recuperar, y con ella se pierden tus bitcoins”.
Por este motivo, es importante usar una aplicación que genere la clave o semilla. Coinbase es la más famosa pues emula a un banco tradicional, pero en realidad quienes poseen las claves privadas son ellos, el usuario sólo tiene la contraseña de su base de datos, que está expuesta al cibercrimen. Lo mismo pasa con las casas de cambio.
Por eso, Medina recomienda aplicaciones diferentes a Coinbase. Para móviles Android, Coinomi y Mycelium; y para teléfonos iPhone: Bread Wallet, exclusiva para bitcoin y Loaf Wallet para litecoin. Asimismo, agrega que para sumas grandes de dinero lo aconsejable es tener un USB con chips encriptados.
5. No destinar todos los ahorros a criptomonedas
Las grandes rentabilidades de bitcoin tienen un precio: los riesgos, la volatilidad, el miedo a que todo esto sea una burbuja. De la noche a la mañana, la inversión puede desaparecer. Por ese motivo, cuidado con invertir todo el dinero que tiene ahorrado.
“No voy a invertir todos mis ahorros en unos activos que tienen un riesgo altísimo. Es bastante incongruente. Pongo un ejemplo, si tengo 100.000 euros para invertir, destinaría un 60% de ese dinero a fondos de inversión, a las acciones un 30%. Y el 10% lo dejaría para las criptomonedas”, comenta García.
Y un último aviso de este corredor de Bolsa: “Es verdad que las criptomonedas cuentan con la rentabilidad más alta, pero no puedo exponerme a algo que da tantos sustos, sobre todo si el objetivo es lograr una inversión consistente y regular”.