Leticia Núñez (ALN).- El gobierno de Lenín Moreno se enfrenta a la desaceleración de la economía. Según un informe de la Corporación de Estudios para el Desarrollo de Ecuador, esto se debe a varios factores. Entre ellos, el menor ritmo de crecimiento de la demanda interna y del consumo de los hogares, así como la caída de la inversión pública. No obstante, hay signos positivos. La inversión extranjera directa creció 21% respecto a 2017.
La economía ecuatoriana se desacelera. Son varias las señales que evidencian que crece a un ritmo más lento. Ahí están, por ejemplo, los últimos datos del Banco Central de Ecuador (BCE). El organismo calcula que el Producto Interior Bruto (PIB) aumentó 0,9% en el segundo trimestre de este año. De enero a junio, el crecimiento económico fue de 1,3% frente a 2,4% del mismo periodo de 2017.
Algo que “muestra una clara desaceleración del nivel de actividad”, tal como asegura laCorporación de Estudios para el Desarrollo de Ecuador (Cordes), una institución privada sin fines de lucro fundada en 1984 por académicos y profesionales con experiencia en el sector público y privado, en su último informe.
Según Cordes, el 0,9% de crecimiento interanual del segundo trimestre es la tasa más baja desde 2016, año en el que la economía se contrajo 1,5%, de acuerdo con los datos del Banco Central.
Hay varios factores que lo explican. El primero es la desaceleración en la demanda interna, que creció 3,3%, lejos de las tasas en torno a 6% que se registraron en los tres últimos trimestres de 2017 y también por debajo del 3,9% del primer trimestre de 2018.
En el primer trimestre, Ecuador captó 223 millones de dólares en inversión extranjera directa
Después está el consumo de los hogares. Crece, pero lo hace con menos fuerza. La subida fue de 3,3% de marzo a junio. Nuevamente, por debajo del 3,6% del mismo periodo de 2017. No obstante, acumula un aumento de 2,9% en lo que va de año.
El tercer factor es la caída de la inversión por parte del Gobierno central. En este punto, cabe destacar que el gobierno de Lenín Moreno aprobó el pasado 23 de agosto un plan para reducir el gasto público y el déficit fiscal con el fin de ahorrar 1.000 millones de dólares, tal como anunció el presidente. No obstante, la deuda pública del país se sitúa en 60.000 millones de dólares.
Entre las reformas aprobadas destaca la eliminación de ministerios y empresas públicas, la venta de vehículos oficiales, acabar con las contrataciones a dedo y subir el precio de la gasolina (Ver más:Las 5 reformas del gobierno de Lenín Moreno).
En cuarto lugar, Cordes destaca que las exportaciones de bienes y servicios también “muestran una sensible desaceleración al pasar de una ya modesta tasa de crecimiento interanual de 1,3% en el primer trimestre de este año a una de apenas 0,2% en el segundo, la tasa más baja desde inicios de 2016”.
Por el contrario, las importaciones registraron un crecimiento interanual de 8,6%, acumulando un aumento de 9,1% en el primer semestre.
Finalmente, el informe apunta un quinto factor. Señala que, a nivel de industrias, 10 de las 18 que se detallan en el boletín de cuentas nacionales crecieron menos en el segundo trimestre que en el primero. Pero no sólo eso. 12 de las 18 también registraron un aumento menor que en 2017.
Entre estas actividades están la agricultura, petróleo y minas (que acumula seis caídas interanuales consecutivas), refinación de petróleo (que según el informe de Cordes se habría desplomado 36% de marzo a junio), manufacturas, comercio, servicios financieros y alojamiento y servicios de comida.
En el lado opuesto, las industrias cuyo crecimiento en el segundo trimestre fue mayor que en 2017 incluyen la construcción (que el año pasado se contrajo 4,4% y en el segundo trimestre de este año subió 1,1%), transporte, administración pública, enseñanza y servicios sociales y de salud, con un aumento de 5,7%.
Signos positivos
Pero en medio de este escenario de decrecimiento también hay signos positivos. Por ejemplo, la recuperación de la inversión privada, que en 2017 escaló de 13.617 millones de dólares a 15.400 millones de dólares. En el primer trimestre, Ecuador captó 223 millones de dólares en inversión extranjera directa, 21,3% más que en el mismo periodo de 2017, según el BCE.
Desde el gobierno de Lenín Moreno confían plenamente en leyes como la de Fomento Productivo, una herramienta que permite atraer inversión extranjera, crear empleo y aumentar la recaudación tributaria. En ello está volcado todo el Ejecutivo. La semana pasada, Moreno mantuvo un encuentro con 72 empresarios miembros del foro Americas Society y de la organización empresarial internacional Council of The Americas, entre cuyos miembros figuran importantes multinacionales con negocios en Latinoamérica como Apple, IBM, Monsanto y BBVA (Ver más: Los 2 días en que Lenín Moreno se acercó más a los empresarios y se alejó más del chavismo).
Fue precisamente en esa reunión donde Moreno habló a los empresarios de la Ley Orgánica para el Fomento Productivo, que incluye incentivos tributarios, beneficios para las Zedes (Zonas Especiales de Desarrollo Económico), contratos de inversión con arbitraje internacional, así como alianzas público-privadas.