María Rodríguez (ALN).- Todas las explicaciones (y excusas) sobre los apagones en Venezuela no han tenido en cuenta -hasta ahora- el papel de PDVSA. La petrolera estatal no puede hacer frente a sus necesidades eléctricas de forma autónoma y se conecta a la red central. Esto incide en la sobrecarga del sistema. Pero también hay más explicaciones de por qué PDVSA “es sin duda un factor más de la crisis energética”, según detalla al diario ALnavío Jorge Alejandro Rodríguez, experto en electricidad y articulista de The New York Times.
El régimen de Nicolás Maduro ha dado una gran cantidad de supuestas explicaciones sobre el colapso energético en Venezuela. Con el megapagón de comienzos de marzo, el régimen acusó directamente a Estados Unidos de lanzar un ciberataque contra la sala de controles de El Guri. De esta central procede 80% de la energía eléctrica de Venezuela.
Juan Guaidó, presidente encargado de Venezuela, echó por tierra la excusa del ciberataque: “Todos los técnicos coinciden en que eso es imposible por una razón simple: es un sistema analógico”, aclaró en Twitter Guaidó, quien además es ingeniero.
La explicación de los expertos fue la siguiente: un incendio afectó las tres líneas que conectan la estación central de El Guri con las subestaciones Malenay y San Gerónimo B.
¿Y los nuevos apagones? Maduro atribuye las nuevas fallas a ataques perpetrados a las instalaciones eléctricas por parte de opositores a su régimen -léase Juan Guaidó-, lo que entra en franca contradicción con los señalamientos hechos tras el apagón del 7 de marzo por el ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López, según los cuales tales instalaciones serían militarizadas y supervisadas por las Fuerzas Armadas. “No tienen una explicación sensata, creíble”, dijo Guaidó.
Alarma que Venezuela entra en otra fase más aguda de la crisis económica
Maduro llegó incluso más allá este miércoles y detalló que el último “sabotaje eléctrico” consistió en un “ataque terrorista realizado con un fusil” en el patio de los autotransformadores de El Guri.
Expertos en el área atribuyen las fallas a problemas acumulados por más de una década en mantenimiento y falta de experiencia de quienes dirigen el sector. También a la falta de inversiones y corrupción.
Pero todas las explicaciones no han tenido en cuenta que PDVSA también incide en que estos apagones se sucedan. Un factor que sí analiza el economista jefe de Torino Economics, Francisco Rodríguez, y Jorge Alejandro Rodríguez, experto en electricidad, articulista de The New York Times y exvicepresidente de generación y transmisión de energía en la empresa venezolana Cadafe.
Para ambos expertos PDVSA es un factor más de la crisis energética, un factor de triple acción. Pero ¿por qué? ¿Qué tres cosas hace (o no hace) la industria petrolera de Venezuela que contribuyen a los apagones?
1 Producción de gas por los suelos
No es nada nuevo que la producción de gas en Venezuela esté en mínimos. Esto también impacta en la crisis energética, tal como explica Francisco Rodríguez en el último informe de Torino Economics. “Aunque los bajos niveles de operación en el sistema termoeléctrico son un problema de larga data, una de las razones que contribuyó a la crisis fue la baja disponibilidad de gas y diésel como consecuencia tanto de la disminución de la producción de PDVSA como de las sanciones adoptadas el 28 de enero por Estados Unidos y que impidieron la compra de derivados petroleros a entidades con sede en ese país”, subraya Rodríguez.
“Hay que tomar en cuenta que la producción de gas en el país se encuentra en el piso, de manera que la casi totalidad de las turbinas termoeléctricas que habrían de operar en gas o con gas están utilizando diésel, que tampoco se está produciendo y que se estaba importando en cantidades muy importantes. Todo esto configura un cuadro de crisis”
Una valoración que comparte Jorge Alejandro Rodríguez. En declaraciones al diario ALnavío, este experto sostiene: “Hay que tomar en cuenta que la producción de gas en el país se encuentra en el piso, de manera que la casi totalidad de las turbinas termoeléctricas que habrían de operar en gas o con gas están utilizando diésel, que tampoco se está produciendo y que se estaba importando en cantidades muy importantes. Todo esto configura un cuadro de crisis”.
2 Falta de mantenimiento
PDVSA, como las centrales generadoras de electricidad en el país, también tiene falta de mantenimiento. Desde Torino Economics subrayan que la industria petrolera “no pudo reemplazar sus generadores”, los que utiliza para el autoabastecimiento de electricidad, y tuvo que buscar otras opciones. En un artículo de Francisco Rodríguez y Jorge Alejandro Rodríguez publicado en The New York Times tratan esta cuestión. “General Electric (GE) y Siemens fabrican la mayoría de los generadores eléctricos empleados en la industria petrolera de Venezuela y gran parte del equipo principal utilizado en las plantas hidroeléctricas del país. Las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos a Venezuela dejaron sin la capacidad de pagarle a estos proveedores extranjeros”, explican.
En este sentido, Jorge Alejandro Rodríguez afirma al diario ALnavío que “los proveedores de las tecnologías necesarias para el funcionamiento de los grandes grupos generadores, de la red troncal de transmisión extra alta tensión y alta tensión, son muy pocos en el mundo. Un grupo de empresas que no se van a arriesgar ante las sanciones previstas”. ¿Y los aliados actuales de Maduro, Rusia, Turquía y China? “No poseen las tecnologías necesarias. En el caso de China, si tiene algunas, no son tecnologías propias, sino que operan bajo licencias, que también tienen a su vez restricciones en su uso”, recalca el experto.
Y ¿qué solución adoptó PDVSA ante la falta de autoabastecimiento de electricidad? Así se llega al punto 3.
3 Conectarse a la red central
“En la medida en que la industria petrolera no pudo reemplazar sus generadores, comenzó a aprovechar la red eléctrica del país con mayor intensidad, lo que contribuyó a la sobrecarga del sistema”, explica Francisco Rodríguez en el informe de Torino Economics.
Por su parte, Jorge Alejandro Rodríguez precisa que, “aunque el sector petrolero venezolano no es un gran consumidor de electricidad”, al conectarse a un sistema “tan precario” como el que actualmente existe en el país, inevitablemente ayuda a sobrecargar el sistema.
De aquí cabe subrayar dos cuestiones. Una. Con sus afirmaciones, ambos expertos constatan que PDVSA no puede hacer frente a sus necesidades eléctricas de forma autónoma y debe conectarse a la red central. Y dos. Que esa consecuencia incide en la sobrecarga del sistema y, por tanto, en los apagones que afectan gravemente la vida cotidiana de los venezolanos que aún permanecen en el país.
7 años de falta de mantenimiento provocan un superapagón en Venezuela
¿Cuánto influyen las sanciones de EEUU en los apagones?
Otra cuestión es cuánto pueden influir las sanciones de EEUU a la crisis energética en el país. Una disyuntiva que Francisco Rodríguez y Jorge Alejandro Rodríguez también tratan conjuntamente en el artículo de The New York Times.
“No se puede concluir a la ligera que las sanciones hayan sido algo más que un factor secundario en las causas de los cortes masivos de electricidad que sufre Venezuela. Es evidente que la escasa inversión, la falta de mantenimiento y la crisis económica del país, acentuadas por la corrupción y los absurdos subsidios a la electricidad, son las principales causas. En este sentido, Hugo Chávez y Nicolás Maduro sin duda son los principales responsables del derrumbe del sector eléctrico”, subrayan ambos expertos.
En declaraciones a ALnavío, Jorge Alejandro Rodríguez insiste en este “rol secundario” de las sanciones como efecto sobre la crisis. Recalca que “las sobrecargas en el sistema de transmisión ya son inevitables. Y sólo pueden solucionarse con el funcionamiento de las plantas térmicas”. Algo que “la situación actual no permite preverlo”.
“Para salir de esta crisis energética, o para al menos que se mantenga un nivel precario de funcionamiento distinto a los racionamientos por bloques de energía que ya se anuncian, es necesario un acuerdo político, de mínimos, en tanto que Nicolás Maduro no salga del poder. Si saliera del poder, se podría solventar sin duda alguna con una mayor celeridad”, concluye el experto.
No obstante, la realidad es que “no se sabe cuándo se restablecerá completamente la energía”, tal como alerta la Embajada de EEUU en Venezuela. De ahí que esta institución inste a los estadounidenses a abandonar el país “mientras haya vuelos comerciales disponibles”. Para los que se queden, varios consejos: asegurarse de tener suministros adecuados, evitar acudir a manifestaciones y grandes concentraciones, estar atentos a las últimas noticias locales, mantenerse en contacto con familia, amigos y allegados, y revisar los planes de seguridad personal.