María Rodríguez (ALN).- La Corporación Andina de Fomento aconseja a las entidades financieras latinoamericanas diseñar productos que tengan en cuenta las necesidades económicas de las mujeres. También alienta a los gobiernos de la región a potenciar la educación financiera en el sector femenino y a establecer políticas públicas para que la brecha de género, también en las finanzas, desaparezca.
En América Latina y el Caribe sólo 49% de las mujeres tiene una cuenta bancaria, sólo 11% ahorra y sólo 10% dispone de crédito; valores que para los hombres representan 54%, 16% y 13% respectivamente, según datos del Banco Mundial de 2015.
El informe Inclusión financiera de las mujeres en América Latina, elaborado por la CAF (Corporación Andina de Fomento – Banco de Desarrollo de América Latina) y publicado este miércoles achaca esa brecha a tres causas: los estereotipos de género, patrones socioculturales relacionados con la propiedad y la división del trabajo, y la ausencia de información recurrente que determine las necesidades financieras de las mujeres latinoamericanas.
En América Latina y el Caribe sólo 49% de las mujeres tiene una cuenta bancaria
Para revertir esta situación, la CAF hace en dicho informe tres recomendaciones, una sobre productos financieros, otra sobre información estadística y una tercera vinculada a la educación financiera.
1. Productos financieros favorables para mujeres
La primera recomendación de la CAF es que las entidades financieras latinoamericanas diseñen productos que también tengan en cuenta la perspectiva de género, potencien las capacidades de las mujeres e impulsen sus negocios.
Según la CAF, algunas de las medidas exitosas de las instituciones financieras con programas específicos para las mujeres son: créditos sin aval, préstamos a tasas más bajas para madres cabeza de hogar, ampliación de los periodos de gracia; disminución de la tarifa mínima para la apertura de una cuenta de ahorro, etcétera.
2. Más estadísticas sobre las necesidades financieras de las mujeres
La segunda recomendación de la CAF va dirigida a gobiernos y bancos centrales, a los que alienta para que establezcan “mecanismos de análisis y recolección de datos que permitan diseñar políticas públicas enfocadas a reducir las brechas financieras entre hombres y mujeres”. Un ejemplo de ello sería incluir preguntas sobre necesidades financieras según el género en las encuestas que se envían habitualmente a los hogares.
“Fomentar las competencias financieras de las mujeres es un reto para la política pública” de América Latina, afirma la CAF
3. Potenciar la educación financiera de las mujeres
La tercera recomendación de la CAF subraya la necesidad de potenciar la educación financiera de las mujeres. “Hay evidencia de que las mujeres tienen menores conocimientos sobre información, conceptos o herramientas de utilidad para el acceso, elección y uso de los productos financieros en comparación con los hombres”, explican en el informe.
Por esta razón, “fomentar las competencias financieras de las mujeres es un reto para la política pública y una necesidad del sistema financiero para disponer de una clientela con una cultura financiera que minimice los niveles de riesgo y fomente la competencia”, subrayan.